domingo, 22 de febrero de 2009

Lo bueno dura muy poco...

Y tan poco que dura lo bueno... con lo bien que había comenzado el viernes. Valió la pena de sobra el madrugón y si volviera a repetir el día 100 veces, 100 veces que hubiera madrugado para poder ir junto a Anca, la que habla en múltiples idiomas, a sus prácticas de radio en la Complutense. Sólo digo que el próximo viernes también voy. Además, llego a la universidad y veo mi última nota. Ya sé lo que es una Mención de Honor. El resto del día, queda impregnado por esa momentánea felicidad. Si, estaba sin Constante, pero era el orgullo de ver como se erige un Imperio. Y además, acabamos reflexionando sobre Platón.
Pero claro, demasiado bueno para mí. A la tarde, vamos a Alcalá y por Torrejón para comprar accesorios de los disfraces... y al llegar la noche, después de una disgregación de la mayoria, Payo, el buen anfitrión, Cris, la que levanta el ánimo, y yo, el escriba, vamos a casa de Nerea, la que siempre está ahí, a cenar. Tras ello, sólo diré que caí cuan largo y redondo soy... Pero gracias al buen anfitrión y a la anfitriona de la casa, nada pasó a mayores y les agradecí mucho y en el alma su ayuda. Fue un auténtico, "Flashes Before your Eyes".
Pero debería haberlo considerado una de mis numerosas revelaciones... que yo cayera significaba que lo bueno que había tenido, también lo haría, y así fue. Con lo bien que empezaron los carnavales. Un rato con los Payo primos y Toñin, el que sabe de fútbol, gana el Madrid, gana el Espanyol al Barcelona, vuelven a decir que hay liga, tomamos algo en casa de una amiga, vamos un ratillo de bares... parece perfecto, pero claro, como l@s hay que me llaman amargado, pues nada, lo bueno dura poco. Cuando te quieres dar cuenta, te estás enfrentando a las versiones femeninas de Borís Yeltsin, Franklin D. Roosevelt y Wiston Churchill, en lo que a temas del alcohol se refieren, a enemistades antiguas, a pesados en un antro que llaman discoteca o a etarras sobones que se pegan como lapas, seguramente porque están haciendo algunas de sus prácticas de explosivos o de espionaje. Y claro, como uno mantiene la cordura y al día siguiente reprocha, es el malo, que, palabras de algun@s, "se sobra mazo"... Si, sin lugar a dudas, la Verdad se sobra para quien no está habituado a ella. En otras palabras, sales con intención de pasártelo bien y acabas amargado... y claro, ya aprovechan y te acusan con golpes bajos y lo rematan con la guindilla de "es que eres un amargado"...
Así pasa, un fin de semana improductivo, asi que mañana me tocará trabajar. Lo peor es que ya la felicidad de uno se desvanece y ya casi no sabe como encontrarla... pero al fin y al cabo eso es normal, sin una Constante. Por cierto, Lost se pone cada vez más interesante y las referencias son cada vez más atractivas para mi.

No hay comentarios:

Publicar un comentario